CAPÍTULO 3: ¿Cómo funciona en la práctica?
La participación de los trabajadores puede tener carácter más o menos formal, puede implicar a representantes de los trabajadores o llevarse a cabo directamente, pero debe ser un intercambio significativo de información y opiniones sobre las decisiones y políticas de la empresa.
Las formas directas de participación de los trabajadores incluyen reuniones entre representantes de los empresarios y trabajadores, comunicación por escrito y diversas formas informales de incluir a los trabajadores en la toma de decisiones a nivel de empresa.
Las formas representativas de participación de los trabajadores pueden llevarse a cabo a través de representantes de los trabajadores elegidos específicamente a tal efecto o a través de representantes sindicales.
En las pequeñas empresas pueden fomentarse métodos más informales y directos, mientras que en las grandes empresas la elección de representantes especiales de los trabajadores, o la realización de estos procedimientos a través de los representantes sindicales, suele ser el mejor método y el más eficaz.
Los procedimientos de información y consulta suelen realizarse por escrito. También deben basarse en información de calidad y estar debidamente programados.
La dirección debe facilitar a los representantes de los trabajadores la información necesaria para tener una visión objetiva y justa de los resultados de la empresa y entablar un diálogo constructivo.
La información debe ser completa, pero también debe presentarse de manera que los representantes de los trabajadores puedan comprenderla y evaluarla adecuadamente.
La consulta con los representantes de los trabajadores debe hacerse en un plazo razonable antes de adoptar la decisión, para que exista la posibilidad de que su opinión influya en la decisión final.
Para desempeñar su papel en los procedimientos de información y consulta, los representantes de los trabajadores deben mantener una comunicación frecuente con los trabajadores.
Esto incluye tanto la capacidad de informar y consultar a los trabajadores durante los procedimientos de información y consulta, como una comunicación regular con los trabajadores que les permita recoger sus opiniones, necesidades y quejas.
Los representantes de los trabajadores también deben disponer del tiempo y los recursos adecuados para ejercer su función. La legislación nacional de algunos países incluye disposiciones al respecto, pero los detalles también pueden establecerse mediante un acuerdo con el empresario.
Los representantes de los trabajadores deben disfrutar de tiempo de trabajo remunerado, tener acceso a salas de reuniones, equipos de comunicación y otros recursos necesarios, y poder visitar diferentes locales de la empresa y mantener un contacto regular con los trabajadores. También deben tener derecho a tiempo libre remunerado para su formación.